viernes, 15 de mayo de 2009

relato 268

28/01/09        10:58
✖ remotamente parecido a como nuestra alma sería capaz....

Debería como algunos con buena voluntad me aconsejan,
dejar de columpiarme
de una vez por todas,
y comenzar a moldear mi futuro
con constancia,
claro que tan sólo es, lo que "debería" hacer.
Quizás si al menos fuese funcional a mis ojos
y lógico para mi cabeza,
pero es que cuanto más lo destripo
más errores le encuentro,
y cada vez, estos son mayores.

Desearía poder cerrar los ojos,
y al abrirlos perder la obsesión
por el desarrollo mental,
por la observación de todo cuanto existe
y deja de existir,
por el acto de dar su valor correspondiente,
a todo lo que se pueda imaginar.
Y viéndome como acostumbro a hacer,
desde fuera,
me doy cuenta de un pequeño detalle,
y es que justo desearía hacer desaparecer
hasta terminar los estudios,
las características principales
de mi estructura de vida,
las maneras que me hacen ser alguien más
que uno hecho con el molde instaurado
por la sociedad y por el sistema,
alguien que tan sólo desea
que se le permita ser él mismo
ante cualquier situación o circunstancia,
sin tener que guardar la expresividad
o que controlar los pensamientos dichos.

Por lo que veo no es nada fácil la batalla
entre los impulsos del alma (deseos),
y todo lo que rodea a esta.
Pareciese que el mundo está atento en todo momento,
para sincronizar nuestra inspiración
con momentos donde no se pueda utilizar,
como si le diese a un parapléjico olímpicas piscinas
y a un nadador profesional sillas de ruedas.

Y tras esta cortina de pensamientos
y estados mentales,
dejo en el centro del escenario
un inmenso cartel blanco,
con unas centradas y ordenadas letras negras
que parecen decir:
"....desde los comienzos comprendimos,
que el trueque era una base de evolución
muy convincente,
ya que somos muchos,
y todos tenemos algo que ya no necesitamos
y que otro sí desea.

Pero con el tiempo el truque se quedó corto
para los seres humanos,
demostrar el poder que tenían con bienes materiales
ya no les era suficiente,
así que decidieron inventar la moneda,
y con el tiempo, el billete la siguió
formando el dinero tal cual se conoce ahora.
Con este podíamos cambiar lo que quisiéramos.
Tal fue su poder, su necesidad,
que sin este
la supervivencia se dificultaba en muchos casos
hasta el punto de fingir sentimientos 
durante un fragmento de vida,
todo por conseguir una exorbitante cantidad de dinero a cambio,
y así poder alimentarse y alimentar a la familia
durante años y años,
y eso en el caso de que fuese para alimentarse o sobrevivir.

Otro tipo de trueque muy inteligente fue el del tiempo,
donde unos daban horas de sus vidas
para ayudar a otras personas,
y a cambio como no, más dinero.
¿Qué ocurre?
Que si resulta que centramos la mayoría de nuestras acciones
en tener que conseguir monedas y billetes,
estos acaban por devorar nuestras vidas
y no nos dejan días sólo para pensar,
o días sólo para entendernos a nosotros mismos
y a nuestros semejantes,
ni siquiera nos dejan días para disfrutar de estos mismos días;
nos obligan a ser lo egoístas y maleducados que haga falta,
nos dirigen a la desintegración de nuestra ética y nuestra moral,
si tras tal comportamiento
se esconde una cifra con varios ceros de derechas,
porque tan sólo así
nos hacen creer que podemos cumplir todos nuestros deseos,
y como tontos nos dejamos moldear,
llegando a dejar de ser nosotros mismos
dejando de lado todos los talentos que albergamos,
y teniendo que elegir únicamente uno, del cual sacar dinero,
para al menos sobrevivir remotamente parecido
a como nuestra alma sería capaz.

Y antes de esto
tener que leer conceptos de varios libros repetitivamente,
para acabar olvidándolos en un par de semanas,
en vez de comenzar a pulir los dones de cada uno desde ya,
para lo antes posible explotar tales cualidades
y así construir al mundo,
en vez de destruirlo y re-destruirlo,
con los mismos errores de siempre
envenenados desde las raíces.

Con el paso del tiempo
el ocio fue cogiendo mayor importancia en el hombre,
ya que se facilitaban las necesidades primarias
hasta casi ni realizarlas,
y esto conlleva tener más tiempo
para hacer lo que nos venga en gana.
Cada vez más personas
trabajan en algo relacionado con el tiempo libre de otros,
ojalá algún día consigamos hacer que el mundo se mueva,
sólo con trabajos de este tipo."

..nota mental: hacer de$aparecer todo el dinero del planeta
de cualquier manera imaginada,
únicamente para ob
$ervar, como $e de$envuelve el $er humano
$in $u eje actual.... 
.:268:.

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